Por Polanco Aníbal
El triunfo y el fracaso, dos opciones de los que se (arriesgan)
Quien podría negar que la educación se ha convertido en un absurdo social que engloba un porciento relevante de la juventud que hoy tendría que ser el futuro del mundo, una gran mayoría de jóvenes siente temor para enfrentar el principal soporte que tiene para su futuro, es la base del progreso en el correr de su vida, el emprendimiento de sacrificio y los riesgos para el futuro temen enfrentarlos, un grupo de burgués, investido de empresario que inculcan a jóvenes que se inician en sus estudios, vendiéndoles opciones de falsedades sin riesgos como triunfos para que se desvíen de sus estudios y que no acepten el riesgo en base al sacrificio de sus luchas estudiantiles.
Las medidas de prevención para proteger las ilusiones de jóvenes emprendedores, sujetas a las autoridades que gobiernan, no ofrecen seguridades pues su rol y obligaciones de motivar el riesgo juvenil, se circunscribe a las diatribas entre unos y otros gobiernos que no les importa la situación de esos jóvenes y sus estudios, situación adversa por todas las administraciones que cada 4 años gobiernan los partiduchos tradiciones sin impórtale el futuro de triunfo que pudieran lograr los jóvenes, si los que administran los fondos públicos pusieran interés con una escolaridad de opciones, los jóvenes lograran el triunfo en base al riesgo pero siempre motivada con las inversiones o aportes necesarias que son los factores positivos para motivar el riesgo.
La situación de riesgos positivos está sustentada en una burguesía que no le interesa el triunfo escolar que pueda ofrecer el estado, se forjan o empeñan en un futuro que destruya el triunfo de la juventud que estudia, pero que favorezca sus bondades empresariales, pues esos mismo verdugos inculcan mundialmente publicidad absurdas y con objetivos rastreros de conducir a los jóvenes que ingresan a buenos futuros académicos para que no sean tontos y que se alejen de esos caminos, pues el triunfo de riquezas y buenas posibilidades esta en las sustancias narcótica y otras malezas , motivándolo a un mundo sin riesgos y con un triunfo que es una falsa para el desarrollo colectivo con riesgo de luchas, pero con triunfo positivo.
El triunfo y el fracaso, son dos tendencias que una y otra pueden ofrecer entusiasmo tristezas o llantos, pero forjar triunfos en una sociedad con restricciones o limitaciones que impone una política económica sujeta a un grupo poderoso que todo lo abarca cuesta sacrificios, y que la juventud de hoy se enclava en una diversidad de pasiones que los poderosos y la misma sociedad manipulada por los extremos negativos que enfrentan buscan el triunfo no en la escolarización, pues la manipulación de una burguesía extremada en que el estudio no sea el triunfo juvenil, más bien que logre objetivo en el mundo mafioso de los vicios dañinos y del bajo mundo.
Una transformación social provocada por los jerarcas que dominan todas las instancias de mayores trascendencias sociales, políticas, religiosas y económicas, perciben que sus intereses pueden sucumbir en baja, si los que buscan triunfo poniendo como sostén la preparación profesional o académica, lo que ellos traducen como un fracaso de la plusvalía de su más importantes negocios, sustentado en sustancias narcóticas. Los jóvenes deben enfrentar el riesgo, para lograr el triunfo o el fracaso, buscando el estudio como su triunfo en base al desarrollo, incluyéndose en un instituto o universidad en bien de un desarrollo sostenible.
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