
Nuevo plan multisectorial busca garantizar servicios básicos resilientes ante el cambio climático
Santo Domingo R.D, miércoles 6 de agosto de 2025.- Con el objetivo de garantizar servicios básicos resilientes y de calidad en los centros de salud del país, el Ministerio de Salud, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Gabinete del Agua, firmaron una declaratoria conjunta que traza la hoja de ruta nacional para superar las principales barreras en materia de agua potable, saneamiento e higiene (WASHBAT, por sus siglas en inglés).
El acuerdo de cooperación fue firmado por el ministro de Salud, Víctor Atallah, Anyoli Sanabria, representante interina de UNICEF en el país y Gilberto Reynoso, director ejecutivo del Gabinete Agua.
La actividad, que incluyó la firma de una declaratoria interinstitucional, reunió a representantes del Servicio Nacional de Salud (SNS) y de las instituciones del sector agua, compuesto por el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillado (INAPA) y las ocho Corporaciones de Acueductos y Alcantarillados (CORAAs), de las cuales participaron siete en este proceso.
Estas entidades se comprometieron a apoyar al sector salud e integrar las acciones propuestas en sus respectivos planes institucionales, con el fin de garantizar su operativización y sostenibilidad. También estuvieron presentes otros actores clave, como el Consejo Nacional de Cambio Climático, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MIMARN), la Cruz Roja Dominicana, la Pastoral Materno Infantil y la Fundación Plenitud.
El ministro de Salud resaltó que uno de los puntos más relevantes del compromiso asumido es que se contemplará la calidad del agua como un criterio obligatorio para la habilitación de los centros de salud, además de incluirla en los presupuestos de construcción y del mantenimiento de nuevas infraestructuras.
“El análisis de cuellos de botella ha sido clave para identificar brechas. No hay resiliencia sin soluciones sostenibles. Lo que hacemos hoy no puede perderse mañana por falta de mantenimiento o seguimiento, destacando que uno de los grandes desafíos en los centros de salud es precisamente garantizar el suministro de agua limpia y segura”, subrayó el funcionario.
Durante su intervención, Atallah afirmó que “el acceso a agua potable y saneamiento es un derecho fundamental que impacta directamente en la salud de nuestras comunidades. Este plan de acción nos permitirá cerrar brechas históricas y garantizar atención digna, segura y oportuna para todos”.
La firma de la declaratoria marca el inicio de una nueva etapa de acción coordinada entre instituciones del Estado, organismos internacionales y actores comunitarios. “Donde hay agua, hay vida. Donde hay agua de calidad, hay salud. Ese es nuestro compromiso”, concluyó.
Mientras, la representante interina de UNICEF, Anyoli Sanabria destacó que “cada niña y niño tiene derecho a crecer sano y seguro, y eso empieza por garantizar agua limpia y saneamiento adecuado en cada centro hospitalario. Con este plan, la nación dominicana avanza para proteger la infancia y hacer realidad los derechos básicos para todas las familias”.
El plan contempla incorporar la calidad del agua como un requisito para la habilitación de centros de salud, así como garantizar que los presupuestos de infraestructura contemplen tanto la instalación como el mantenimiento de sistemas de agua segura. “Donde hay agua con calidad, hay salud y vida y garantizarla no es opcional: es una obligación para proteger a quienes más lo necesitan, especialmente a niños, niñas y adolescentes», sostuvo Sanabria, a la vez que reiteró el compromiso desde UNICEF para acompañar técnicamente la implementación del plan.
De igual forma, Sanabria, enfatizó en que el acceso sostenible al agua no solo es un derecho humano, es una condición esencial para que las comunidades resistan los efectos del cambio climático. Invertir en agua segura y saneamiento hoy es proteger el futuro de nuestras niñas y niños.
“Ningún niño o niña debe quedar atrás por vivir en una zona rural o en una comunidad marginada. La garantía de agua potable y saneamiento digno debe llegar a cada rincón del territorio dominicano. Esta es una responsabilidad ineludible del Estado y una tarea colectiva que exige coordinación entre todos los actores, con equidad como principio rector”, remarcó.
De su lado, el director del Gabinete del Agua, Gilberto Reynoso, señaló que acompañar a las autoridades del sistema de salud en esta tarea será una gran contribución a República Dominicana, porque en los centros de salud se protege lo más valioso: la calidad de vida y la salud del pueblo dominicano.
Compromiso interinstitucional
La hoja de ruta fue elaborada a partir del Análisis de los Efectos del Cambio Climático sobre Agua, Saneamiento e Higiene en Centros de Salud, también denominado “Análisis de Cuellos de Botella”. Este proceso fue liderado por el Gabinete del Agua, en coordinación con el MISPAS, el Servicio Nacional de Salud (SNS), y con el acompañamiento técnico de UNICEF y el Instituto Internacional del Agua de Estocolmo (SIWI).
Durante el proceso se empleó la herramienta WASHBAT (Water, Sanitation and Hygiene Bottleneck Analysis Tool), la cual permitió identificar los principales desafíos y proponer soluciones operativas, sostenibles y resilientes a corto, mediano y largo plazo.
Análisis técnico
En este contexto, la nación dominicana presentó los resultados del Análisis de los Efectos del Cambio Climático sobre Agua, Saneamiento e Higiene en Centros de Salud (también conocido como Análisis de Cuellos de Botella), una herramienta participativa que identificó los principales obstáculos para que los espacios sanitarios del país cuenten con servicios sostenibles, de calidad y resilientes.
Los hallazgos del análisis cobraron mayor relevancia al considerar los datos publicados recientemente durante la realización de la encuesta nacional de
Hogares de Propósitos Múltiples (ENHOGAR 2024), de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), los cuales indican que, si bien el 70.9% de los hogares dominicanos recibe agua del acueducto público, solo un 28.5% accede al servicio de forma continua durante seis o siete días a la semana. A su vez, el 31.8% recibe agua por menos de cinco horas diarias, situación que también afecta a los centros de salud, comprometiendo las condiciones de higiene y el control de infecciones.
Una ruta compartida
En el año 2024, el proceso culminó con un taller multisectorial que reunió a representantes clave de los sectores salud, agua, medio ambiente y cambio climático, y esto permitió consensuar una declaratoria conjunta y un plan de acción orientado a la mejora de los servicios WASH en centros de salud del país.